
Las uñas encarnadas, también conocidas médicamente como onicocriptosis, son un problema común que afecta a personas de todas las edades. Esta afección se produce cuando el borde de la uña, generalmente del dedo gordo del pie, crece de forma anormal hacia la piel circundante, causando dolor, enrojecimiento, inflamación e incluso infección. Si bien algunos casos pueden tratarse en casa, es fundamental acudir a un podólogo cuando el problema se vuelve recurrente o severo.
➡️¿Por Qué se Encarnan las Uñas?
Existen diversas causas que pueden provocar uñas encarnadas:
- Corte incorrecto de las uñas, especialmente al redondear los bordes.
- Uso de calzado apretado, que ejerce presión sobre los dedos.
- Golpes o traumatismos repetidos en los dedos del pie.
- Factores genéticos, como una curvatura natural de la uña.
- Mala higiene o sudoración excesiva, que reblandece la piel y facilita que la uña penetre.
📎Síntomas de una Uña Encarnada
- – Dolor intenso al tocar o caminar.
- – Inflamación o enrojecimiento en el borde de la uña.
- – Presencia de pus o secreción (en casos con infección).
- – Endurecimiento de la piel alrededor del área afectada.
✍️Tratamiento Profesional: ¿Qué Hace el Podólogo?
Un podólogo es el especialista en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades del pie, y es el profesional más indicado para tratar una uña encarnada de manera segura y efectiva. El abordaje depende del grado de gravedad:
1. Tratamiento Conservador
Para casos leves o en etapas iniciales:
- Limpieza y desinfección del área.
- Corte profesional de la uña, evitando dañar la piel.
- Colocación de una lámina o algodón bajo la uña para redirigir su crecimiento.
- Recomendaciones de higiene y calzado adecuado.
2. Tratamiento Quirúrgico Menor
En casos más avanzados, cuando hay infección o recidivas frecuentes, el podólogo puede realizar una intervención ambulatoria llamada matricectomía parcial, que consiste en:
- Retirar el borde encarnado de la uña.
- Aplicar un agente químico (habitualmente fenol) para evitar que esa parte vuelva a crecer.
- El procedimiento es rápido, seguro, y se realiza con anestesia local.
Prevención: Consejos del Podólogo
- Cortar las uñas en línea recta, sin redondear los bordes.
- Usar calzado cómodo, con espacio suficiente para los dedos.
- Evitar el uso prolongado de zapatos ajustados o de tacón alto.
- Mantener una buena higiene de los pies.
- Acudir al podólogo ante los primeros signos de molestia.
Conclusión
Las uñas encarnadas pueden parecer un problema menor, pero si no se tratan adecuadamente, pueden derivar en infecciones dolorosas o crónicas. Un podólogo no solo puede aliviar el dolor, sino también prevenir su reaparición mediante tratamientos personalizados. Si experimentas molestias persistentes en tus uñas, no dudes en consultar a un profesional: tus pies te lo agradecerán.